vídeo de la noticia:
http://www.europapress.es/video.aspx?v=20070618140027La fundación Altarriba recoge una burra abandonada que desde hacía "un mes" deambulaba por el cementerio de Collserola MADRID, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las personas de seguridad del cementerio de Collserola no daban crédito a lo que veían cada día. Una burra se paseaba, desorientada y sin dueño aparente, desde hacía un mes por los alrededores de las instalaciones. Una socia de la Fundación Altarriba también fue testigo de cómo la burra se paseaba por la zona y de su mal estado por lo que decidió llevarla a un refugio.
Leonor Díaz de Liaño, encargada del Refugio de caballos y burros de la Fundación Altarriba, explicó a Europa Press Televisión que la burra llevaba "un mes" abandonada en las cercanías del cementerio. "Estaba entre los coches y comía hierba", aseguró la cuidadora.
La burra, la cual han bautizado 'Mel o Dolça' (miel o dulce) por la ternura que desprende, tenía distintas heridas de consideración cuando la recogieron. "Tenía heridas muy feas en las partas delanteras que llegaban al hueso", denunció Leonor. Sin embargo, a pesar de su mal estado la burra no estaba desnutrida, ya que durante el mes que estuvo sola se alimentaba de "hierbas" e incluso comía "flores de las coronas".
Poco a poco, las heridas del animal van "mejorando" y Leonor aseguró que está "respondiendo muy bien al tratamiento". Así, señaló que le cambian las vendas "dos veces al día" para evitar que se "infecten" por culpa de los mosquitos.
La burra se quedará en este refugio hasta que esté en "perfecto estado" y cuando llegue ese momento, la pondrán en "adopción" como hacen con todos los animales que reciben en el refugio.
Respecto a quién pudo abandonar al animal, la cuidadora comentó que no sabían "nada" pero que estaban intentando averiguar quién era para poder ponerles una "denuncia por maltrato y abandono".
Desde la Fundación Altarriba se aseguró que son "muchos" los animales abandonados en núcleos urbanos. Leonor comentó que en una ocasión llegaron a recoger a "un pony en la Diagonal de Barcelona" o incluso a "un caballo en una gasolinera".
A la hora de las adopciones, Leonor es consciente que los animales "jóvenes y sanos" son adoptados más fácilmente, mientras que los "cojos, viejos o enfermos" son más difíciles de dar en adopción.
La cuidadora afirmó estar "harta" por la irresponsabilidad de mucha gente en abandonar animales ya que como comentó "nadie te obliga a tener animales".